«El grito de los sin voz: represión, austeridad y la batalla por la dignidad»
El miércoles al atardecer, el Congreso de la Nación se convirtió en el escenario de un operativo que mezcló el absurdo con la crueldad. Cientos de efectivos de Prefectura, Gendarmería y la inusual Policía Aeroportuaria —con chalecos antibalas y escudos— rodearon a un grupo de jubilados que, con carteles hechos a mano y banderas desgastadas, reclamaban por pensiones dignas.











