Tras una reunión con empresarios, Kicillof dijo que el ajuste de Milei tendrá «consecuencias devastadoras»

Luego de un encuentro con cámaras empresariales, el gobernador publicó un duro mensaje en contra las medidas económicas del gobierno.

El gobernador se reunió en el Salón Dorado de la Casa de Gobierno con representantes de cámaras y agrupaciones empresariales de la provincia de Buenos Aires. El objetivo fue analizar la situación actual del sector y el impacto de las medidas que el nuevo gobierno plantea introducir en las próximas horas en el Congreso con el proyecto de Ley Ómnibus.

Al hablarles a los empresarios Kicillof dijo que «ustedes, como representantes del sector, son quienes pueden explicar con más legitimidad que cualquiera de qué se tratan los industricidios y quiénes los sufren. Nuestra provincia tiene una potencia productiva inmensa y no tiene que ser interrumpida por estas políticas».

Más tarde, en un posteo en Twitter el gobernador retomó algunos conceptos de la reunión y aseguró que el «programa ortodoxo, convencional y clásico siempre cae sobre la espalda de los trabajadores y las clases medias, con consecuencias devastadoras en la producción».

 

Kicillof -y en menor medida el riojano Ricardo Quintela- lidera la oposición más dura contra Milei. La semana pasada el gobernador promovió una cumbre para apoyar el paro de la CGT. En la liga de gobernadores peronistas, el bonaerense es el más crítico. Otros se muestran alejados y prefieren el silencio antes la medidas económicas.

Ustedes, como representantes del sector empresario, son quienes pueden explicar con más legitimidad que cualquiera de qué se tratan los industricidios y quiénes los sufren.

La semana pasada el gobernador mantuvo un encuentro similar, pero con nueve intendentes del conurbano quienes le trazaron un diagnóstico durísimo respecto de la situación social que se empieza a vivir en los territorios.

Los intendentes informaron al gobernador sobre un fuerte crecimiento de la demanda de comida para comedores populares. También sobre demanda de trabajo en los municipios.

El escenario que plasmaron los intendentes a Kicillof es dramático. También mostraron preocupación por la interrupción y el abandono de unas 1.000 obras que el Gobierno Nacional tenía en ejecución en los distintos municipios de la provincia. Esto, aseguran en el gobierno, tendrá un efecto negativo sobre el empleo y el consumo local.