Se pone en marcha el peronismo: Axel Kicillof en el PJ nacional, cumbre de Máximo Kirchner en Cañuelas y el eje Llaryora-Gray


Un encuentro secreto en Matheu para marcarle la cancha al retornado «Alberto Fernández». Expectativas por cónclave en Cañuelas. El gobernador cordobés atrae desencantados de La Cámpora y abre línea interna.

 


Una sorpresiva reunión del PJ nacional anoche mostró a Axel Kicillof, gobernador bonaerense, en el centro de la escena, con otros mandatarios provinciales, diputados y exfuncionarios de la gestión anterior como Wado de Pedro, casi candidato presidencial, representante del kirchnerismo.

El encuentro sirvió para empezar a reordenar el partido y adelantarse a la foto que este sábado tendrá Máximo Kirchner en Cañuelas, en la cumbre del PJ bonaerense que preside, y de la cual saldrá un documento que apuntará principalmente al enemigo externo: Javier Milei. No obstante, además del PJ nacional con Kicillof, de vínculo ecléctico con La Cámpora, también se anticipó Fernando Gray, intendente de Esteban Echevarría, el primero en pedirle salida a Máximo para avanzar en una renovación post derrota electoral. Se mostró en Córdoba hoy junto al gobernador de esa provincia, Martín Llaryora.
Por caso, no confirmaron presencia en Cañuelas desde ese núcleo que integra al intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, quien rompió con el Instituto Patria, y al Juanchi Zabaleta, exintendente de Hurlingham, derrotado en las PASO 2023 por el candidato impuesto por el camporismo, Damián Selci, quien luego ganó el municipio en las generales de noviembre. “Lo de mañana es el pasado. Nadie está de acuerdo con Máximo pero nadie lo dice”, dijo otro jefe comunal.
Otro convite que estaba anunciado para mañana, el del Frente Renovador con Sergio Massa a la cabeza, se postergó una semana.

“Poner la máquina en marcha”

El encuentro del PJ nacional en la sede de Matheu se dio en momento de regreso de su titular, Alberto Fernández, al país, quien también empieza a despedirse de ese sillón y no tuvo invitación asignada. Se organizó desde las sombras y por eso no hubo foto formal. Asistieron, además de Kicillof, otros tres gobernadores: Gildo Insfrán (Formosa), Sergio Ziliotto (La Pampa) y Ricardo Quintela (La Rioja). Los que quedaron en pie de esa liga que se desgranó primero con las elecciones y luego con gestos de autonomía de otros mandatarios, como Gustavo Sáenz (Salta) u Osvaldo Jaldo (Tucumán). En esa interna tucumana, sí estuvo Juan Manzur, el exgobernador. También estuvo el expresidente del partido, el sanjuanino José Luis Gioja, así como los vicepresidentes del Consejo justicialista, Cristina Álvarez Rodríguez, Analía Rach Quiroga y Lucía Corpacci (los otros dos vices son Manzur y Kicillof)

La idea fue la reorganización del partido, mencionaron, desde el peronismo. “Poner la máquina en marcha”, dijeron. Además de avanzar en un pedido de renuncia formal a Alberto Fernández, quien tiene mandato hasta 2025, aunque el encuentro estaba pautado desde antes de que se conociera el retorno del expresidente. “La idea no es tirar a nadie por la ventana”, mencionaron, aunque también admiten que le «marcaron la cancha».

Kicillof tuvo centralidad lógica como gobernador del distrito más poblado del país, y reelecto en medio del caos. “Nosotros no tenemos participación en el PJ bonaerense”, aclararon desde La Plata ante la consulta sobre el cónclave de Cañuelas. No obstante, señalaron que la relación “está bien”. Coinciden también en el Patria que hay puentes entre Máximo y Kicillof, con intercambios y diferencias a la vista. “Hay diferencias, pero si tienen que trabajar juntos, lo hacen”, dijeron desde las cercanías del diputado nacional. Por caso, la participación de Wado en Matheu le dio silla a un dirigente cercano a Cristina Kirchner. “Se habló de la realidad de la gente ante el ajuste, de la posición que tiene que tener el PJ ante ello, de la posibilidad de reconfigurar el partido pensando en esa nueva etapa”, señalaron dirigentes que participaron en la cumbre, que duró dos horas, hasta las 21.

En tanto, la cumbre de Cañuelas de este sábado, la del PJ bonaerense, evitará caer en temas internos. Esperan elaborar un documento anti Milei y que el diálogo se centre en las estrategias legislativas para poner un freno a las reformas libertarias. No coincide Máximo en que sean tiempos de discutir liderazgos. Esperan que esos surgimientos decanten al andar. A diferencia del PRO o el radicalismo, que aguardan una reestructuración para dar rienda a acuerdos nacionales, La Cámpora cree que hay que ir de lo externo a lo interno.

También se prevé para este sábado un cabildo abierto del PJ porteño en la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET) y una jornada de debate en la Universidad de Buenos Aires (UBA) organizada por el espacio “Peronismo Soberano”.