Fernanda Miño: «Tenemos que enraizar las políticas de integración urbana en los territorios»

La Secretaria de Integración Socio Urbana de Nación habló con Ladran Sancho sobre los avances en programas de lotes con servicios y mejoras habitacionales.

Su padre y su madre vinieron del Chaco a Buenos Aires buscando empleo. Desde los 12 años salió a laburar fuera de casa para ayudar a la familia. Fue empleada en casas de familia cama adentro, catequista, educadora y militante popular.

Actualmente, es Secretaria de Integración Sociourbana y continúa viviendo en un barrio popular, «La Cava» en San Isidro. Conoce de primera mano la realidad fulera cuando faltan las cloacas y el agua corriente, cuando una lluvia se vuelve sinónimo de inundación y cuando transitar por el barrio es esquivar pozos.

Desde su secretaría ejecutan los programas de lotes con servicios y mejoras habitacionales como «Mi Pieza» y obras de infraestructura destinadas a mejorar las condiciones de 4.416 barrios populares. Fernanda Miño cuenta sobre la importancia de urbanizar los barrios populares.

—¿Cómo avanza el trabajo en la secretaría en este último tiempo?

—En los últimos meses, los vecinos en el barrio me paran para contarnos que están contentos porque fueron seleccionados para alguna mejora habitacional, o qué tienen dudas en algún trámite. Las obras se empiezan a ver y a charlar en los barrios y esto es lo importante, que se pueda lograr una continuidad en esta línea de trabajo en los sectores populares porque permite volver a tener esperanza en que se pueden mejorar las cosas a partir de la política.

—¿Se cumple con la Ley de Integración Sociourbana que propone un cupo del 25% para cooperativas de trabajo en la asignación de las obras?

—Esto es muy importante, a veces es complicado, pero en cada barrio nosotros nos comprometemos con que las obras lleguen a todas las provincias y le pedimos a las organizaciones que empujen porque es un círculo virtuoso. La mirada de las organizaciones y las cooperativas enriquecen las obras, está es una política joven y queremos enraizarla en los territorios. Tenemos que hacer que estas políticas nos trasciendan y que la mirada sensible de los sectores populares se impregne en el Estado.

A nivel nacional hay más de 300 convenios firmados destinados a obras en barrios populares para la generación de lotes con servicios y mejoras habitacionales. La inversión supera los 30 mil millones de pesos y surgen del impuesto a las grandes fortunas.

Uno de los más ambiciosos ya está en marcha en Luján, para la generación de 850 lotes con servicios que prevé una inversión de 1.250 millones de pesos. Se desarrollarán en dos locaciones, una en el barrio Los Laureles con 412 parcelas y otra en el predio de la Colonia Montes de Oca en Torres con 412 parcelas. Recientemente, Miño firmó el convenio con el intendente Boto y el proyecto ya se está analizando en el Consejo Urbano Ambiental y el Consejo Deliberante.

—¿Qué nos podés adelantar del proyecto de lotes con servicios que se va a realizar en Luján?

—Todavía estamos charlando sobre lo que esto significa. Es una obra histórica y que esté dirigida a sectores populares es emocionante. En la Secretaría tenemos que cuidar cada centavo para que las obras vayan a quienes más lo necesitan. Este proyecto que le va a permitir acceder a la tierra a muchas familias, va a impactar en generaciones. Durante el año que viene se van a estar desarrollando las obras de luz, agua, cloacas, apertura de calles y ya estamos pensando la articulación con el Ministerio de Hábitat para ver cómo podemos seguir.

—Un aspecto importante para destacar es que el financiamiento de estas obras surge del impuesto a las grandes fortunas…

—En el gobierno todos sabemos sobre la importancia del financiamiento. Con el Impuesto País pudimos empezar a desarrollar algunas cosas, pero en pequeña escala y con el aporte de las grandes fortunas pudimos pensar políticas de largo aliento y llegar a todo el país, transformando la realidad de los barrios populares. Hablamos de infraestructura y de servicios básicos que en muchos lugares aún no hay. El recurso es finito, en algún momento se va a acabar y tendremos que seguir discutiendo y buscando cómo continuar.

—Antes de llegar a la Secretaría Nacional fuiste concejala en San Isidro. Desde esa experiencia, ¿Cómo evalúas el rol de los gobiernos municipales a la hora de implementar estos proyectos?

—Los gobiernos locales son los que tienen la cercanía con la comunidad y es de suma importancia para los sectores populares. El trabajo en el Concejo Deliberante también es importante para generar políticas de largo plazo. Hoy tenemos oportunidades únicas para desarrollar este tipo de obras y necesitamos arraigarla desde esos espacios para que cuando cambien las gestiones los proyectos continúen y se defiendan. En el caso de Luján confió que este proyecto va a ser defendido por todos.