Katopodis canceló una obra clave para La Plata por irregularidades con una empresa vinculada a Nicky Caputo

Decavial había ganado la licitación para un acueducto que contaba con más de $4.500 millones de un fondo kuwaití.


El gobierno de Axel Kicillof canceló una licitación que había ganado la empresa Decavial SA en 2022 para construir un acueducto que mejoraría el servicio de agua potable en La Plata.

El ministro de Infraestructura, Gabriel Katopodis, decidió dar por cancelada la licitación luego de que se detectaran irregularidades en la constructora ligada a Nicolás Caputo.

En el texto, el ministro destacó que la compañía «no acreditó el cumplimiento de las obligaciones fiscales referidas a los impuestos sobre los Ingresos Brutos, Inmobiliario y a los Automotores» por lo que se decidió desistir de la oferta de la constructora y se declaró fracasada la licitación.

Según pudo saber LPO, la constructora se encuentra en un proceso de quiebra, con irregularidades insalvables en AFIP y la Agencia de Recaudación bonaerense.

El proyecto acueducto Plaza San Martín contemplaba la construcción de un gran anillo que uniría la nueva planta potabilizadora que se construye en Ensenada con planta potabilizadora ubicada en el Parque San Martín (dentro del casco urbano de la capital provincial).

Fuentes del gobierno aseguran que la obra se va a volver a licitar y que los fondos kuwaitíes están asegurados. Además agregan que no hay dudas respecto del proyecto a ejecutar por lo que creen que en pocos meses la iniciativa volverá al ruedo.

Decavial es una constructora que en 2008 se asoció a Caputo SA para la compra del terreno del Hospital Ferroviario por la suma de USD 6 millones.

Decavial se asoció a Caputo SA para la compra del terreno del Hospital Ferroviario por la suma de USD 6 millones. Tras la adquisición, el gobierno porteño modificó la zonificación del predio, lo que permitió que estas dos empresas vendiesen el terreno en USD 23 millones.

Tras la adquisición, el gobierno porteño modificó la zonificación del predio, lo que permitió que estas dos empresas vendiesen el terreno en USD 23 millones. Es decir, aumentaron un 74% su valor, sin haber tocado el terreno.

Legisladores del kirchnerismo en la Ciudad de Buenos Aires vienen siguiendo el caso y aseguran que la valorización en el precio del suelo se explica a través de la intervención del Estado. Es decir del gobierno de la Ciudad.

Allí destacan en primer lugar una autorización del Gobierno de la Ciudad para construir algo que según el kirchnerismo no es posible. Y luego con unos 2.000 millones de dólares en obra pública en la zona.