La derogación de la ley de alquileres, la reforma laboral y la desregulación de la salud son los tres aspectos del DNU que más cambian la vida de los argentinos. El decretazo incluye varias promesas de su campaña, incluidas las privatizaciones. La tierra podrá extranjerizarse y quemarse. Chau compre nacional y promoción nacional, bienvenido Elon Musk.
Lo que más afecta la vida diaria son tres aspectos del DNU. Por un lado, la derogación de la ley de alquileres, que lleva a que cada propietario ponga sus condiciones para alquiler su inmueble ante los inquilinos. Por otro, la reforma laboral, que abarata el despido al acotar la base de cálculo de la indemnización y además permite que cada sector empresario negocie con el sindicato de su rubro que la elimine para reemplazarla por un seguro de desempleo similar al que rige en la construcción. El tercer ítem es la desregulación de la medicina privada y las obras sociales, incluida las restricciones a sus precios. Nunca Milei ocultó su intención de ir contra la regulación de alquileres y a favor de la flexibilización laboral, pero la división de poderes establece que las facultades del Ejecutivo no son las mismas que las del Legislativo. Tampoco jamás escondió que quería la privatización de la salud, aunque a último momento en la campaña admitió la posibilidad de que persista la ofrecida por el sector público.
La derogación de la ley de compre nacional es un golpe a la industria local y las constructoras locales. La de la promoción industrial constituye otro cross en la mandíbula de algunas fábricas. Derogó la ley de tierras que evitaba la extranjerización masiva. La modificación de la norma del manejo del fuego apunta a terminar con la prohibición de vender y cambiar el destino de terrenos que sufrieron incendios para evitar especulaciones vinculadas a emprendimientos inmobiliarios en las tierras afectadas.
También le hizo un guiño a Elon Musk, el mayor multimillonario del mundo, paladín del antiprogresismo y dueño de la red social X, que viene repitiendo elogios al libertario que preside la Argentina. Desreguló los servicios de Internet satelital y sostuvo que así posibilitará la llegada de Starlink, la empresa de Musk, a la Argentina. Nada dijo que se radique Tesla, la fabricante de autos eléctricos de Musk, que aquí sólo se abastece de litio.
Milei siempre dijo que quería privatizar todas las empresas públicas, salvo una, Aerolíneas Argentinas, que se la quiere enchufar a los sindicatos. El pueblo lo votó y todo esto quedó plasmado por el DNU. Además, Aerolíneas deberá afrontar ahora la desregulación que implica la política de cielos abiertos, también decretada. Ninguna novedad respecto de lo que había prometido.
El 30% lo apoyó en primera vuelta, quizás centrado en su discurso anticasta política y a favor de la dolarización. El 55% lo eligió en la segunda vuelta, harto de los fracasos del peronismo kirchnerista. Pero lo escogió como presidente. No puede gobernar por decreto. En la República rige la división de poderes. Veremos cómo reaccionan el Legislativo y el Judicial.
Alejandro Rebossio