El Gobierno nacional, a través de la Cancillería, destacó los 119 años de presencia ininterrumpida en la Antártida argentina que se cumplen hoy, al recordar que el 22 de febrero de 1904 se tomó posesión e izó la bandera argentina en el Observatorio Meteorológico en la Isla Laurie, Orcadas del Sur, luego llamada Base Orcadas. Hace 26 años que un Presidente de la Nación no pisaba el sector antártico argentino.
La ciencia antártica argentina constituye el eje central de nuestra política antártica y la actividad científica contribuye a nuestros derechos de soberanía en la Antártida.
A partir de la firma del Tratado Antártico, en 1959, la Argentina consolidó también su rol como actor central del acuerdo internacional que reserva el continente para la paz y la cooperación internacional, y resguarda adecuadamente -en su Artículo IV- nuestra reivindicación soberana sobre el Sector Antártico Argentino. A su vez, ratificó su compromiso con la protección del medio ambiente antártico cuando en 1991 firmó el Protocolo al Tratado Antártico sobre Protección del Medio Ambiente, que vela por la protección de los ecosistemas antárticos y, entre otras cosas, prohíbe la explotación minera en el continente antártico.
La Argentina, asimismo, ostenta un papel protagónico dentro del Sistema del Tratado Antártico que rige toda la actividad dentro del continente, fruto de una ardua labor diplomática, científica y logística. Desde 2004, la Secretaría Ejecutiva del Tratado Antártico tiene su sede en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
A su vez, mediante acuerdos de cooperación internacional con programas antárticos de otros países la Argentina busca potenciar las capacidades científicas nacionales. Así, nuestro país reafirma hoy su compromiso con los principios básicos de mantenimiento de paz, cooperación científica internacional y protección del medio ambiente antártico. El compromiso ambiental argentino se demuestra con la propuesta presentada junto a Chile de creación de un Área Marina Protegida en la Península Antártica que tiene como objeto la conservación del ecosistema marino antártico.
Fuente: Cancillería Argentina.