La comida, que encabezaron el jefe de Coninagro, Carlos Iannizzotto, y el secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, se pautó hace unos días en el congreso de la entidad y Massa había sido participado. Como no había confirmado su presencia, sorprendió a varios su visita, cerca del final del convite. En esa mesa estaban todos los representantes de las economías regionales, que escucharon al secretario y al ministro.

«Si estaba ahí, es porque están muy avanzadas las conversaciones, como para que se hagan anuncios en breve», describió ante Página I12 una fuente del Gobierno que está al tanto de los temas. Si bien las partes se comprometieron a no hablar antes de que haya anuncios concretos, este diario tuvo acceso a algunas de las decisiones que se darán a conocer.

La primera, que saldrá en breve, es la prórroga por un período de tiempo no definido del corte de 12,5 de biodiesel en gasoil. Esta medida, que se trabajó en los encuentros con la Mesa de Enlace, apunta a reducir los faltantes de gasoil para la cosecha. Esta decisión cubre además otro frente: recrear la capacidad instalada insatisfecha de las plantas de biocombustibles.

Por otra parte, se habló en el almuerzo de una reforma fiscal integral. Se comprometieron a que se cree en el seno del Congreso una comisión para que se trate el tema. Apuntan a que en el mediano plazo haya cambios en Ganancias, Ingresos Brutos y Derechos de Exportación. Se trabajaría en el Parlamento un proyecto de ley en ese sentido.

Por último, si bien no está del todo definido, el Gobierno hará cambios en el dólar soja. Al esquema de 70/30, que establecía la posibilidad de que los productores transformen a dólar financiero el 30 por ciento de sus ingresos en pesos, se le harán modificaciones y pasará a una proporción de 60/40. Esto responde, en parte, a que cuando nació el dólar soja, el dólar MEP costaba 320 pesos y hoy llega a los 280. De todos modos, no se descarta que haya otros incentivos del Gobierno para que el sector suelte los porotos de soja que tiene en silobolsas.

El tema, además de ser una urgencia de dólares para el Gobierno, también está generando una paralización de la producción agroindustrial, dado que no están pudiendo comprar porotos de soja para transformar en aceite o harinas. Un dato fuerte: las ventas de los productores a los exportadores este mes están en el nivel más bajo en 20 años.