Grabois desafía a Massa y tensa al kirchnerismo: “Voy a ser candidato sí o sí”

El líder de Patria Grande amenaza con romper la unidad en octubre. Sus declaraciones encendieron cruces internos entre Cristina, Massa y Kicillof, y ponen en riesgo bancas clave si se fragmenta el armado electoral.

Por Redacción Data Política y Económica


 Una candidatura que sacude al peronismo

A menos de tres semanas del cierre de listas nacionales, Juan Grabois, líder del ahora partido Patria Grande y referente de Unión por la Patria, ratificó que será candidato a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires en las elecciones de octubre. No obstante, su decisión de competir por afuera si no logra encabezar una lista de unidad tensiona internamente a la coalición oficialista.

Grabois va más allá de la aspiración: afirma con firmeza: “Voy a ser candidato sí o sí”. “¿Con lista propia o bajo Fuerza Patria? Eso depende de los genios de la política”, ironizó en redes y medios nacionales. Su diagnóstico incluye una medición favorable respecto de Massa: “Mide ocho puntos menos que yo”, señaló durante un programa en C5N.

Una interna expuesta

El malestar en el universo K se hace sentir. En el entorno de Cristina Kirchner creen que Grabois exhibe ambiciones personales más que vocación de consolidar acuerdos. “Está bastante grandecito para ponerse así”, comentan desde el núcleo duro kirchnerista

En nombre del massismo, Sebastián Galmarini fue contundente: lo tildó de “mentiroso, delirante e inútil”, acusándolo de querer dividir el voto peronista para beneficiar a Milei. Dijo que “no cortás ni una vereda y ahora querés que gane Milei” . Y recordó que la estructura de Patria Grande ya forma parte del acuerdo pactado para competir unidos tanto en septiembre como en octubre en provincia.

La interna no se limita al massismo: en La Cámpora también cayó mal el tono de Grabois. Mayra Mendoza se preguntó: “¿Tiene sentido tirotearse en Twitter?”

¿Qué se juega en conflicto?

Más allá del choque personal, el núcleo del conflicto es electoral. Sin PASO, el sistema D’Hondt distribuye bancas por agregación. Si Grabois encabeza una lista por afuera de Unión por la Patria, podría producirse una fragmentación excesiva y pérdida de bancas clave. En un escenario ajustado, eso podría significar perder representación en el Congreso nacional para el espacio oficial partido en la legislatura provincial, que se vota el 7 de septiembre. En caso de no lograr ese respaldo, amenaza con salirse del acuerdo general.

¿Qué busca Grabois?

grabois proviene de un proyecto que en 2023 obtuvo 1,3 millones de votos en las PASO presidenciales. Su objetivo expresa: representar a sectores populares y jóvenes marginados por el sistema político. En Tigre, ante el intendente Julio Zamora y referentes del Movimiento Evita, definió su propósito:

“Llenar el Congreso, los Concejos deliberantes y la juventud con dirigentes comprometidos con las banderas del movimiento nacional”

Promueve un esquema de cupo: “un tercio para clase trabajadora, un tercio para juventud y un tercio para militancia partidaria” . Se presenta como un activista con respaldo moral del cristinismo, aunque sin pertenecer orgánicamente al círculo interno de Cristina.

Cristina, Massa y un equilibrio inestable

Cristina Kirchner prefiere mantener distancia pública. Su entorno remarca que “Cristina no es jefa de Grabois”, pese a su afinidad con su agenda social. La expresidenta defiende la “unidad”, aunque el escenario parece desbocarse

Tácticas para unidad: convocó a debate y destacó la necesidad de un frente común para derrotar a Milei.

Kicillof, por otro lado, presiona con su armado provincial —Movimiento Derecho al Futuro— y reclama equilibrios ante el protagonismo creciente de Grabois y su espacio

Calendario en marcha

  • 7 de septiembre: elecciones provinciales en Buenos Aires para renovar 46 bancas en Diputados y 23 en Senado

  • 26 de octubre: legislativas nacionales, sin PASO, bajo la modalidad de boleta única papel.

  • 17 de agosto: fecha límite para registrar alianzas y candidatos nacionales.

Con el cierre de listas en puerta, las negociaciones internas se intensifican. El poder de definición de Grabois radica en su capacidad de movilización y su legitimidad en sectores populares. Pero su postura “todo o nada” podría fracturar la unidad que Cristina, Massa y Kicillof intentan preservar.

 ¿Hacia dónde va la coalición?

La apuesta de Grabois a consolidar su presencia como figura central tiene un límite: si la interna se fragmenta demasiado, podrían perderse bancas claves en el marco de un peronismo que se reconstruye tras años de crisis.

Un sistema electoral rígido asociado a coaliciones cerradas sin PASO obliga a acordar listas homogéneas. El triunfo electoral en octubre depende hoy más de acuerdos internos que de votos sueltos. En ese sentido, la permanencia de Grabois dentro de Unión por la Patria —aunque sea en lista de unidad— parece más rentable que su retiro conflictivo.

Sin embargo, si continúa el choque de egos y la negativa a ceder posiciones relevantes, la fractura podría frustrar tanto expectativas políticas como representación institucional.