Milei apuesta al desgaste de Kicillof y delega el territorio

La Libertad Avanza enfrenta su propio conflicto interno tras el cierre de listas, pero busca reordenarse con una estrategia centrada en el ataque al gobernador bonaerense. Sin un candidato fuerte ni una campaña territorial desplegada, Milei apuesta a polarizar desde los medios y las redes, mientras crece el protagonismo de exfuerzas de seguridad en los distritos clave.

Por Redacción – Data Política y Económica

La interna que sacudió al peronismo bonaerense por el armado de listas encuentra su contracara en La Libertad Avanza (LLA), donde las tensiones entre los armadores de Javier Milei también salieron a la superficie. El cierre de candidaturas dejó expuestas las disputas entre el núcleo más cercano al asesor Santiago Caputo —conocido como “Las Fuerzas del Cielo”— y la línea dura que responde a Karina Milei y al presidente del partido en la provincia, Sebastián Pareja.

“Cuestionar el armado de listas es cuestionar al Presidente mismo y a la causa que nos trajo hasta acá”, lanzó Pareja en un mensaje que buscó disciplinar a las filas libertarias tras las críticas a la selección de candidatos. Horas después, Karina Milei reforzó esa línea con un tuit en respaldo explícito a su operador. En la Casa Rosada confirmaron que ambos mensajes contaron con el aval del Presidente.

Pero más allá de las advertencias públicas, en LLA saben que las heridas internas siguen abiertas. Como informó Infobae, no está previsto ningún acto de campaña de magnitud en la provincia, ni siquiera como gesto de distensión hacia los sectores desplazados. En palabras de un operador del karinismo: “El vínculo está roto”.

Una campaña sin calle, pero con blanco definido

En medio de la inercia organizativa, el oficialismo nacional comienza a delinear su estrategia bonaerense: evitar la exposición de Milei en la campaña local, dejar el territorio en manos de los referentes distritales y concentrar los esfuerzos en una ofensiva discursiva contra el gobernador Axel Kicillof, a quien consideran el blanco ideal para consolidar la polarización.

“No vamos a desgastar a Milei con una elección legislativa provincial. Lo necesitamos fuerte para el tramo nacional, junto a Espert”, reconocen desde el entorno presidencial. Es la primera vez desde 1983 que la provincia de Buenos Aires desdobla sus comicios legislativos de los nacionales, una novedad que deja a los libertarios sin el empuje de la boleta presidencial.

En ese marco, el discurso libertario se organiza en torno a la crítica feroz al modelo bonaerense. “Pelotudo”, “pichón de Stalin” y “burro eunuco” fueron algunos de los epítetos que utilizó Milei para referirse a Kicillof en su reciente acto en La Plata. Lo acusó de haber convertido al conurbano en “una villa miseria gigante” dominada por la inseguridad, la violencia y el analfabetismo. Lejos de disculparse, el Presidente redobla su ofensiva: en su visión, la gestión bonaerense encarna el modelo “anti-Milei”.

Inseguridad, el eje libertario en el conurbano

La Tercera Sección Electoral, bastión del peronismo, será uno de los escenarios principales del combate discursivo. Allí, LLA apuesta a Maximiliano Bondarenko, excomisario inspector de la Policía Bonaerense, como cabeza de lista. Su figura responde al perfil que los libertarios buscan proyectar: mano dura, experiencia en seguridad y discurso directo.

En declaraciones recientes a LN+, Bondarenko ensayó su narrativa: “En la provincia hay chicos torturados, mujeres violadas, hombres golpeados, dedos cortados… eso se vive en el conurbano. La inseguridad es la problemática número uno. El Estado abandonó a las personas”.

El armado libertario busca capitalizar el malestar social en los municipios más castigados, apostando a una agenda simple y polarizada. La consultora Move Group —ligada a Santiago Caputo— ya trabaja en la estrategia comunicacional, en articulación con Lule Menem, operador nacional del espacio. Según reveló Noticias Argentinas, ambos se reunieron días atrás para coordinar las líneas de campaña.

Una provincia clave, pero sin candidato fuerte

A diferencia de la Ciudad Autónoma, donde el vocero presidencial Manuel Adorni encabeza la boleta con fuerte presencia mediática, en Buenos Aires no hay una figura de peso que centralice la campaña. La dispersión territorial —135 municipios y ocho secciones electorales— dificulta la organización de actos y la coordinación del mensaje.

A esto se suma el desgaste por la interna partidaria. La agrupación Las Fuerzas del Cielo, que representa a los sectores más ideológicos y militantes de LLA, quedó casi excluida del armado de listas. Sus críticas se multiplicaron en redes sociales, especialmente contra Pareja y Menem, a quienes acusan de priorizar nombres “no libertarios puros”.

Pese a todo, en el oficialismo creen que la estrategia puede funcionar si logran consolidar el eje discursivo: contrastar el modelo de Milei —basado en la libertad económica, la seguridad y la “batalla cultural”— con el modelo Kicillof, al que asocian con clientelismo, inseguridad y decadencia educativa.

Dos campañas, una provincia en disputa

Tanto el peronismo como La Libertad Avanza llegan a la campaña bonaerense golpeados por sus propias internas. En el caso del oficialismo nacional, la salida elegida es delegar el territorio, evitar exponer al Presidente y concentrarse en instalar un clivaje claro: Kicillof vs. Milei.

El resultado de esa apuesta dependerá no solo de la eficacia de la campaña digital y mediática, sino también de la capacidad del peronismo bonaerense para recuperar cohesión interna. Si los libertarios logran capitalizar la bronca social sin fisuras propias, el 7 de septiembre puede ofrecerles una victoria clave en el corazón del conurbano.