La interna en Unión por la Patria se agudiza. El ministro de Desarrollo de la Comunidad de la provincia de Buenos Aires, Andrés «Cuervo» Larroque, lanzó duras acusaciones contra La Cámpora y su líder, Máximo Kirchner, al señalar que están «extorsionando» al gobernador Axel Kicillof para negociar espacios de poder.
En declaraciones a la prensa, Larroque criticó a los jefes de bloque del oficialismo en la Legislatura provincial, Facundo Tignanelli y Teresa García, por actuar como opositores al negarse a modificar los plazos electorales establecidos por una ley de 1946, a pesar del pedido de la Junta Electoral y el Poder Ejecutivo. «Pasa esto porque están extorsionando a Axel», afirmó el funcionario.
Larroque denuncia extorsión de La Cámpora a Kicillof
El ministro también cuestionó la actitud de ciertos sectores del kirchnerismo que, según él, priorizan el internismo por encima del acompañamiento a la gestión provincial. «Esto es de una irresponsabilidad supina», señaló, y agregó: «Pareciera que para estos chicos el problema es Axel y no Milei».
Una ruptura que se profundiza
La tensión entre Kicillof y La Cámpora no es nueva, pero se ha intensificado en las últimas semanas. La decisión del gobernador de separar las elecciones provinciales de las nacionales fue interpretada por Cristina Fernández de Kirchner y su entorno como una afrenta. La intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, expresó su sorpresa y descontento por la medida, señalando que se había tomado sin consenso .
Desde el entorno de Kicillof, Larroque respondió que el gobernador no es un «empleado» y que sus decisiones deben ser respetadas. «Estamos observando decisiones de Cristina que no coinciden con lo que fue su conducta histórica», afirmó.
El futuro del peronismo en juego
La disputa interna en el peronismo bonaerense se produce en un contexto de avance del gobierno de Javier Milei. Kicillof busca consolidarse como líder de la oposición y renovar el peronismo, mientras enfrenta resistencias dentro de su propio espacio político.
La fractura entre el gobernador y La Cámpora refleja una lucha más profunda por el control del movimiento peronista, que aún no ha superado la derrota electoral de 2023. La disputa marca el inicio de una nueva etapa dentro del peronismo, con epicentro en la provincia de Buenos Aires, cuna histórica del movimiento.
En este escenario, la unidad del peronismo se ve amenazada, y las decisiones que se tomen en los próximos meses serán clave para definir el rumbo del espacio político y su capacidad para enfrentar al oficialismo nacional.
