El Papa Francisco intensifica sus críticas contra Netanyahu: «Ametrallan niños, bombardean escuelas y hospitales…»

El Papa Francisco ha elevado el tono en su crítica hacia las acciones del gobierno de Israel en Gaza, describiendo las operaciones militares como «crueles» y destacando la gravedad de la situación humanitaria. Durante el Ángelus del domingo, el Pontífice reiteró sus acusaciones, afirmando que «los ametrallamientos contra niños y los bombardeos de escuelas y hospitales» representan una crueldad inaceptable. Estas declaraciones marcan un nivel poco frecuente de confrontación diplomática entre el Vaticano y Tel Aviv.

Un lenguaje contundente

El sábado, Francisco ya había condenado la muerte de siete niños de una misma familia en Gaza, un hecho reportado por la Defensa Civil palestina. «Ayer bombardearon a niños… Esto no es guerra, es crueldad», declaró durante una audiencia con miembros de la Curia romana. Estas palabras generaron una rápida y severa respuesta del gobierno de Benjamin Netanyahu, que acusó al Papa de «usar una doble vara» al no reconocer el uso de niños como escudos humanos por parte de grupos terroristas.

Reacciones israelíes

El gobierno israelí calificó los comentarios del Papa como «particularmente decepcionantes» y aseguró que están «desconectados del contexto real y concreto de la lucha de Israel contra el terrorismo yihadista».

Un cambio en el tono del Pontífice

La insistencia de Francisco en condenar las acciones israelíes refleja un cambio significativo en el tono diplomático del Vaticano. Tradicionalmente, la Santa Sede ha mantenido una postura de neutralidad en conflictos políticos y militares, priorizando el diálogo entre las partes. Sin embargo, la escalada de violencia en Gaza ha llevado al Papa a adoptar un discurso más directo y crítico.

A finales de noviembre, Francisco también se refirió a la «prepotencia del invasor» en el contexto de la guerra en Ucrania, aunque nunca con la misma contundencia que utiliza ahora para denunciar las acciones de Israel. En el pasado, también ha acusado al gobierno israelí de «hacer un uso inmoral de la fuerza» en conflictos como los de Líbano y Gaza.

La dimensión diplomática

La situación plantea un desafío diplomático sin precedentes en la relación entre el Vaticano e Israel. Las declaraciones del Papa han generado tensión en un momento ya cargado de complejidad política y humanitaria en Oriente Medio. Para muchos, sus palabras representan un llamado urgente a reconsiderar el costo humano de los conflictos armados y a buscar soluciones que prioricen la protección de los más vulnerables.

El rol del Papa como líder moral y figura de influencia internacional parece haber ganado peso en este contexto, convirtiéndolo en un actor clave en el debate global sobre los límites y responsabilidades en tiempos de guerra.