El presidente Javier Milei cerró su participación en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC) Argentina, un encuentro que reunió a figuras de la derecha internacional provenientes de países como Estados Unidos, Brasil, México, España y Hungría.
En su discurso, Milei arremetió contra la izquierda, los medios de comunicación y el peronismo, al tiempo que reivindicó la lucha cultural como clave para el avance de sus ideas.
“CPAC cuida la cabeza, cuida las ideas”, destacó Milei, calificando al espacio como “guardianes de las ideas” y subrayando su importancia en el actual escenario político. El mandatario aprovechó para criticar los gobiernos de izquierda en la región, mencionando a figuras como Hugo Chávez, Nicolás Maduro, Luiz Inácio Lula da Silva, Dilma Rousseff y Gustavo Petro, entre otros. “Donde ellos gobiernan, generan miseria”, aseguró, pero agregó que esto también ha permitido el surgimiento de “vientos de libertad” liderados por Donald Trump, Nayib Bukele y su propio gobierno.
La batalla cultural como prioridad
En su discurso, Milei enfatizó la importancia de la batalla cultural. “Si no damos esta pelea, no importa cuán buenos seamos gestionando o cuán efectivos seamos políticamente. Si falla la cabeza, el espíritu o la visión, no llegaremos a ningún lado”, afirmó. También mencionó que los desafíos en la gestión son numerosos, pero sostuvo que “la visión fortalece la resiliencia y nos permite enfrentar y derrotar a los zurdos en todos los terrenos”.
A lo largo de su discurso, repitió críticas al socialismo, acusándolo de haberse infiltrado en universidades, medios de comunicación y la cultura. “Como sus ideas son un espanto, donde van generan miseria”, declaró. Sin embargo, señaló que la derecha tiene ahora una oportunidad histórica para revertir esta situación y “cambiar el mundo”.
Dardos contra el peronismo y los medios
Milei también apuntó contra el peronismo, al que denominó despectivamente “los comedores de pochoclos”. Entre aplausos de los presentes, afirmó que “le importa un rábano la opinión de los políticos” y sentenció: “Nunca hay que negociar las ideas para rascar un voto”.
En otro pasaje, dedicó parte de su intervención a criticar a los medios de comunicación, a los que calificó de “mentirosos y rastreros”. Defendió al influencer libertario Daniel “Gordo Dan” Parisini, quien había generado polémica al referirse a Las Fuerzas del Cielo como “el brazo armado” de La Libertad Avanza. Milei acusó a los medios de tergiversar las declaraciones de Parisini y comparó el tratamiento mediático con las acusaciones que enfrentaron los grupos armados de la década del ‘60 y ‘70.
España y el socialismo como blanco
En su alocución, Milei también mencionó a líderes españoles como Pedro Sánchez y José Luis Rodríguez Zapatero, a quienes describió como “la tortura que tienen los pobres españoles”. Redobló su crítica al socialismo, al que señaló como responsable de avances en “terreno virgen” tras la caída del Muro de Berlín, debido a la idea de que ese evento significó el “fin de la historia”.
“No me caen bien los zurdos, no se sorprendan”, lanzó Milei sin rodeos, aunque reconoció que lograron imponer su agenda. Su discurso dejó en claro que, para el mandatario argentino, la lucha contra el socialismo y la batalla cultural son ejes fundamentales de su gestión y su visión política.
