Las PASO en La Plata, dejaron al actual intendente, Julio Garro, con cinco puntos porcentuales por encima del ex intendente Julio Alak. Apenas 14.000 votos de diferencia.
Es una muy mala noticia para Garro, teniendo en cuenta que Alak mantiene un profundo manejo del territorio platense y seguramente, conoce nombre por nombre a muchos de los que votaron por Milei en la capital provincial. Los va a ir a buscar, sin dudas. Y también conoce a las familias enteras que no fueron a votar. Irá por ellas también.
Pero la peor novedad para Julio Garro, llegó con la lluvia. Todo lo que dijo que hizo para que la ciudad no se vuelva a inundar, no dio resultado (o no se hizo). Cientos de platenses debieron abandonar nuevamente sus hogares, por una lluvia que no llegó ni a la mitad de lo que fue la de 2013.
Y en una cuestión tan sensible para los platenses, esto seguramente será facturado en octubre.
Tal como comentaban algunos vecinos de los muchos barrios anegados: “la verdad es que ya no hay muchos argumentos para seguir votando a Garro”. En octubre, tendremos la respuesta.
