A lo largo de siete salas del emblemático edificio se desplegarán obras icónicas de «la embajadora del movimiento pop en Argentina», tal como dijeron desde el museo paulista, algunas de ellas recreadas especialmente para la muestra, como «El Batacazo» (1965) y «Galería Blanda» (1973).

«Live’ es una palabra que alude a la vivacidad, a la presencia corporal y, más directamente aún, denota urgencia en el vocabulario de los medios de comunicación de masas, una plataforma discursiva y tecnológica que siempre ha atraído la atención de la artista. Ya sea en emisiones de radio y televisión en los años 60 o en su canal de Instagram en la actualidad, Marta ha creado el arte como una excusa para sí misma y para que todas las personas puedan expresarse con energía y libertad», manifestó la curadora Ana Maria Maia.

La exposición -que el público podrá visitar hasta el 28 de enero de 2024- repasa momentos cruciales en la trayectoria de la artista, aunque no está organizada cronológicamente, indicaron desde el museo sobre la muestra dedicada a la artista que ha indagado en el nuevo realismo, el arte pop, el conceptualismo, el arte público, el happening y el arte multimedia.

Se podrá recorrer una galería de colchones y tramas multicolores, que documenta «La habitación del amor» (1963) y obras como «Erotismo en technicolor» (1964) o «Freaking on fluo» (2010) o «Galería Blanda», instalación de 1973 realizada con 200 colchones, que fue recreada.

En otra sala se verá la histórica instalación «El Batacazo», que también ha sido recreada 58 años después de su primera presentación en el Instituto Di Tella de Buenos Aires, en 1965. Para la Bienal Iberoamericana de São Paulo, en 1978, la artista aportó la obra «El obelisco acostado».  Ahora, el obelisco, tumbado y reconfigurado, ocupa la sexta sala de exposiciones.