La imprevista noticia de la renuncia del otrora Ministro de Economía Martin Guzmán consagro en solo 48 horas a Silvina Batakis al frente de la cartera de Hacienda.
Su probada experiencia en la gestión económica bonaerense junto al Ex Gobernador Daniel Scioli y el trabajo interprovincial durante su gestión dentro del Ministerio Interior son dos ejes ineludibles a la hora de considerar el porqué de la decisión del Presidente Fernández de otorgarle el comando económico.
Su permanente permanencia a un mismo espacio político y las aceitadas relaciones que acento con la Vicepresidenta Cristina Fernandez durante estos últimos años fueron también el golpe de timón para una aprobación casi unánime de su nombramiento por el conjunto del espectro peronista.
Si bien las primeras definiciones mediáticas tuvieron un calor del apresuramiento, su primera conferencia de prensa en presencia de ministros de la cartera económica si dio la necesaria seguridad de la firmeza de la ministra.
A casi 15 dias de su nombramiento ha dado señales claras de entendimiento con el FMI del cual no obvia palabra justa sobre el origen de nuestro endeudamiento y se lanzo de lleno al dominio total de las finanzas publicas a tal punto de enfrentar los belicosos lideres de los movimientos sociales que gestionan millonarios fondos públicos de dudosa auditacion.
Su valor como mujer aguerrida va dando paso a que su palabra tenga día a día un mayor vigor acompañado por la inexistencia de sesgo de corrupción a lo largo de su trayectoria profesional y política lo que le podría augurar si es acompañada con éxito en su gestión de un porvenir provechoso futuro.
Ha definido claramente que el Estado Argentino no dará lugar a ninguna devaluación más allá de los intensos ataques especulativos hacia el peso argentino que también es objeto de las abruptas fluctuaciones de las monedas extranjeras y de una inflación mundial de difícil predicción a corto y mediano plazo y es por ello que no ha dado un pronostico certero de cual será el indicador local en la materia.
Hablar de desafíos económicos en la Argentina puede dar lugar a una decena de artículos los cuales quedaran permanentemente inconclusos, pero vale considerar algunos de los cuales la flamante ministra tendrá que dar respuesta.
La espiral inflacionaria y su impacto en el poder adquisitivo debe ser mediada por medidas concretas que por un lado recuperen poder de compra de la población y aligeren algunos de los apetitos insaciables del empresariado argentino en particular en los bienes masivos de consumo.
La regular negociación de los compromisos externos argentinos en función de la coyuntura externa y de la evolución de los indicadores local para no comprometer las partidas presupuestarias claves de la gestión de Estado.
Fluir la Inversión Publica en términos federales capaz de consolidar el aparato productivo interno y de una logística permeable competitivamente para la salida exportadora de nuestros productos alentados por un tipo de cambio favorable en términos de comparación internacional.
Reformular la asistencia social hacia el desarrollo de habilidades y capacitaciones sobre esa masa de beneficiarios que no pueden acceder a un trabajo por la falta de formación específica más allá de la recuperación del empleo siendo este un importante indicador en cuanto a la demanda laboral.
Establecer mecanismos financieros para una gestión eficiente del gasto público tal como lo ha establecido de caja única en función de la erogación estatal y de dar lugar a una austeridad en materia de gasto por parte de los distintos estamentos del Estado.
Promover la inversión productiva en aquellos nichos espaciales donde el aliento al desarrollo es necesario evitando la concentración económico-espacial gracias a la reconsideración de la red logística del país que llevara adelante el Plan 5000 Obras.
Acopio de divisas para el fortalecimiento de la divisa local medida en metales preciosos y otras monedas internacionales de cambio más allá de dólar inflacionario al que estamos supeditados en la actualidad.
La necesidad de una revalida peronista en vías a las elecciones del año 2023 sin duda aceleraran dichos desafíos que posiblemente serán vituperados por una masa mediática deformadora del sentido común local pero la concretud de los hechos quizás puedan contrarrestar esta acción disciplina dora en función al rápido retorno de la reacción en la Argentina.
Señora Ministra: Tiene La Palabra –
Ezequiel Beer
Geografo UBA
Analista Politco
