APIA en Europa: la experiencia de Kilometro Rosso como hoja de ruta para un nuevo modelo industrial argentino

En el cierre de la misión institucional por España e Italia, la delegación de la Asociación de Parques Industriales Argentinos visitó Kilometro Rosso, uno de los distritos de innovación más importantes de Europa, para analizar sus modelos de gestión, vinculación público-privada y transferencia tecnológica.


La misión institucional que llevaron adelante la Asociación de Parques Industriales Argentinos (APIA) y la Cámara de Comercio e Industria Ítalo-Iberoamericana (CCIIA) por España e Italia concluyó con una visita estratégica a Kilometro Rosso, uno de los distritos de innovación más relevantes de Europa. La experiencia permitió a la delegación argentina conocer de primera mano un ecosistema que logró articular de manera virtuosa tecnología, empresas y centros de investigación, convirtiendo el conocimiento en soluciones productivas concretas.

Ubicado en la región de Lombardía, en el norte de Italia, Kilometro Rosso se consolidó en las últimas décadas como un hub de innovación aplicada, reconocido a nivel internacional por su capacidad para vincular investigación científica con demandas industriales reales. En este distrito conviven multinacionales, pymes tecnológicas, startups, universidades y centros de I+D, bajo un modelo de gestión que prioriza la colaboración, la transferencia tecnológica y el desarrollo de proyectos conjuntos.

La visita fue encabezada por el presidente de APIA, Rodolfo Games, junto a Darío Pellegrini, representante de la entidad en Italia, quienes recorrieron las instalaciones y mantuvieron encuentros con referentes del distrito. Durante la jornada, la delegación analizó los esquemas de gobernanza, los mecanismos de articulación institucional y las estrategias de financiamiento que explican el posicionamiento de Kilometro Rosso como un polo de referencia en innovación tecnológica.

Desde la organización del distrito se destacó que su funcionamiento se apoya en una lógica de “campus tecnológico”, donde la proximidad física entre empresas, laboratorios y centros de investigación favorece el intercambio de conocimiento, la cooperación interdisciplinaria y la aceleración de procesos de innovación. Este modelo permitió el desarrollo de soluciones avanzadas en áreas como ingeniería, automatización industrial, nuevos materiales, energía, movilidad y digitalización productiva.

Para APIA, la visita tuvo un valor estratégico en el marco de los desafíos que enfrentan los parques industriales argentinos. Según señalaron desde la delegación, uno de los principales aprendizajes fue la importancia de evolucionar desde esquemas tradicionales de localización industrial hacia verdaderos ecosistemas de innovación, capaces de integrar ciencia, tecnología y producción con una mirada de largo plazo.

La articulación con la CCIIA resultó clave para facilitar los contactos institucionales y empresariales durante la misión. La Cámara desempeñó un rol activo en la generación de vínculos entre Italia y la Argentina, promoviendo espacios de cooperación que exceden el intercambio comercial y apuntan a la transferencia de conocimiento, la innovación y el desarrollo productivo conjunto.

La experiencia de Kilometro Rosso también puso en evidencia el peso de la planificación sostenida y la estabilidad institucional en el desarrollo de distritos tecnológicos. A diferencia de iniciativas fragmentadas, el modelo italiano se apoya en reglas claras, continuidad de políticas públicas y una fuerte inversión en la formación de recursos humanos altamente calificados, elementos que resultaron centrales para su consolidación.

En el balance final de la misión APIA-CCIIA 2025, la visita a Kilometro Rosso se destacó como uno de los hitos más relevantes del recorrido europeo. Los aprendizajes obtenidos fueron sistematizados para su análisis y eventual adaptación a proyectos impulsados por APIA en la Argentina, tanto en parques industriales existentes como en nuevas iniciativas vinculadas a polos tecnológicos, incubadoras y distritos de innovación.

De este modo, la misión cerró con una agenda clara: fortalecer la vinculación internacional de los parques industriales argentinos, promover la transferencia tecnológica y construir puentes de cooperación con ecosistemas consolidados, con el objetivo de impulsar un desarrollo industrial basado en la innovación y el agregado de valor.