Un Gobierno sin respuestas para las pymes (ni para los trabajadores)

¿Cuál es el criterio que emplea el Gobierno para darle un tratamiento exprés a una ley como la laboral, que va a marcar las relaciones entre trabajo y producción por años, sin un debate profundo y sin la participación real de todos los sectores involucrados? Más aún cuando aparecen demasiados puntos oscuros que, lejos de aclararse, generan más incertidumbre.

Por Raúl Hutin (*)


Estamos hablando de un proyecto de 196 artículos que modifica de manera sustancial la vida y los ingresos de millones de argentinos. Sin embargo, no se explica por qué debe aprobarse a las apuradas. ¿Qué diferencia habría entre sancionarlo el 30 de diciembre o el 30 de mayo? Lo verdaderamente importante es que una ley de esta magnitud salga con consenso, análisis serio y beneficios concretos para quienes van a convivir con ella todos los días.

Un Gobierno sin respuestas para las pymes (ni para los trabajadores)
Uno de los interrogantes más graves tiene que ver con los fondos que administra la ANSES. ¿Se desviarán, livianamente, unos U$S 3.000 millones que pertenecen a los jubilados para que a las grandes empresas les resulte casi gratis despedir trabajadores? Los empresarios pymes no podemos creer que nuestros diputados y senadores avalen este capítulo cuando los jubilados llevan años peleando por un ingreso digno, cobran haberes congelados y reciben como respuesta permanente que “no hay plata”.
Las PYMES generan el 50% del empleo asalariado registrado argentino
Por eso interpelamos directamente al Congreso. Señoras y señores legisladores: ustedes que dicen representar las necesidades del pueblo y cuentan con equipos técnicos, ¿podrían explicarnos en qué artículos esta ley beneficia a las PYMES y en cuáles mejora la situación de los trabajadores? Hemos leído detenidamente el proyecto y no encontramos esas respuestas.
Lo que sí vemos con claridad es quiénes aparecen como los principales beneficiados: los bancos, que manejarían discrecionalmente esos fondos millonarios; las grandes empresas, para las cuales despedir será mucho más barato; y las multinacionales que se retiran del país en medio del tsunami económico. En cambio, no vemos beneficios ni para el trabajo ni para la producción. Por el contrario, lo que se avecina es un aumento de la conflictividad laboral.
Un nuevo mapa de costos para las pymes argentinas
El Gobierno intenta instalar que esta reforma favorecerá a sectores castigados como las pymes y los jóvenes. En nombre de las pymes nos vemos en la obligación de responder: ninguna entidad pyme fue consultada. Y la experiencia demuestra que estas supuestas “fórmulas mágicas” ya se aplicaron en otras oportunidades. Nunca generaron más empleo; sí produjeron más desocupación, precarización y conflicto.
Si hablamos de los jóvenes, la contradicción es aún más evidente. La propia senadora Bullrich reconoció que hoy hay alrededor de 500.000 trabajadores que dependen de plataformas como Uber, Rappi o similares. Sin embargo, el proyecto no contiene ni un solo artículo que los contemple mínimamente. Tampoco hay propuestas sobre primer empleo, ni segmentación por tamaño de empresa que permita generar incentivos reales a la contratación.
Moratoria para pymes – Dejámelo pensar
Desde la época de Martínez de Hoz hasta hoy, este es el cuarto intento de avanzar sobre las conquistas laborales y sociales. Todos terminaron mal o peor. No hay razones para pensar que esta vez será diferente, sobre todo cuando la iniciativa carece del aval de los principales sectores involucrados.
Las pymes generamos aproximadamente el 70% del empleo privado en la Argentina. Y la experiencia es clara: tomamos trabajadores cuando la economía muestra señales de recuperación, cuando el consumo se reactiva, cuando ese consumo no es absorbido por importaciones indiscriminadas, cuando existen controles serios sobre productos de extra zona y cuando se pone un límite al puerta a puerta que hoy está liquidando tanto a la industria como al comercio.
Nada de eso se resuelve con los artículos de este proyecto. Porque la verdad es simple y conocida: cuando la plaza tira, se toma personal. Todo lo demás es relato.
(*) Empresario y dirigente Pyme