La encuesta reciente de la consultora Synopsis pone de manifiesto un perfil de liderazgo opositor que los votantes argentinos estarían dispuestos a apoyar en las próximas elecciones, destacando una combinación particular de atributos que podrían ser clave para hacer frente al actual presidente, Javier Milei.
La gestión, la afinidad peronista y una proveniencia del interior del país figuran entre las características más valoradas, según los datos obtenidos entre votantes que optaron por figuras alternativas a Milei o que, tras haberlo apoyado en el pasado, hoy buscarían otra opción.
1. Un líder con experiencia en gestión y vocación de intervención económica
El 84,2% de los encuestados considera que el próximo líder opositor debe tener experiencia en gestión, una característica que, según el sondeo, responde a la percepción de falta de estabilidad en el actual gobierno. La remoción de más de 50 funcionarios desde el inicio del mandato de Milei y críticas abiertas sobre la falta de capacidad de gestión, provenientes incluso de aliados como Mauricio Macri, alimentan esta demanda. En un contexto de inestabilidad, los votantes parecen valorar la habilidad para tomar decisiones pragmáticas y mantener la coherencia dentro de la administración pública, un factor que Milei, con su enfoque de outsider, no ha podido consolidar.
Además, el liderazgo en la economía es otro aspecto fundamental para el electorado opositor. Con un 81,6% a favor de un líder que no se resigne a la inercia del mercado y que, por el contrario, tenga vocación de intervención para proteger la producción nacional, la encuesta sugiere que los votantes buscarían una figura que pueda corregir lo que ven como una política económica desestructurada y volátil. El presidente Milei ha priorizado una orientación de libre mercado en sus políticas, pero la insatisfacción económica en varios sectores parece fortalecer el deseo de un líder con sensibilidad hacia el desarrollo productivo nacional y capaz de activar políticas de protección económica.
2. Un perfil que provenga del interior y con una identidad peronista
El 43,4% de los encuestados manifestó una preferencia por un líder del interior, una tendencia que sugiere un cansancio con la centralización del poder en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y un deseo de inclusión federal en el liderazgo. Aunque uno de cada cuatro encuestados no respondió sobre este punto, la inclinación hacia el interior refleja una crítica latente a la falta de representación de las provincias en las decisiones nacionales y a la desconexión percibida entre el gobierno central y las necesidades regionales.
En cuanto a la identidad política, la cercanía al peronismo parece ser un componente esencial para el perfil de un líder opositor. Cerca del 66% de los votantes opositores señalaron que prefieren a alguien identificado con el peronismo, un dato relevante considerando el apoyo que el peronismo tradicional ha mantenido en las bases populares, pese a la irrupción de Milei en el escenario político. Esta afinidad responde no solo a la historia y legado del peronismo en Argentina, sino también a su capacidad de adaptación a las diversas demandas sociales y económicas, algo que parece tener una resonancia particular en la coyuntura actual.
3. La necesidad de un liderazgo renovado, sin caer en el «outsider»
La encuesta también muestra una ligera mayoría (50,5%) a favor de una figura “nueva” en el escenario político, sin experiencia previa de liderazgo nacional, pero sin llegar a la figura de un «outsider» absoluto. Este dato revela una dualidad en las expectativas: los votantes parecen desear una renovación de figuras y estilos, pero no quieren repetir la experiencia de un presidente sin trayectoria institucional. En este sentido, el perfil que buscan los votantes sería el de una figura con suficiente frescura para contrastar con la política tradicional, pero con el conocimiento y la habilidad para gestionar en el ámbito público.
Conclusiones: hacia un nuevo liderazgo peronista para la oposición
El retrato de un líder ideal según esta encuesta invita a la oposición argentina, especialmente al peronismo, a reorganizarse para satisfacer las demandas del electorado que se muestra crítico hacia el gobierno de Milei. La búsqueda de experiencia en gestión, una orientación económica pragmática, y una identidad arraigada en los valores peronistas, apuntan a un regreso a la centralidad política de un peronismo que, lejos de las figuras más conservadoras o radicales, pueda representar una alternativa sólida y coherente para un electorado en crisis de confianza.
Así, este escenario plantea para la oposición el desafío de consolidar un liderazgo que integre las demandas de un electorado cada vez más diverso y exigente. La capacidad de encarnar tanto la renovación como la experiencia podría ser determinante en la carrera de la oposición para recuperar el poder en 2025, marcando una posible vuelta del peronismo como un eje integrador y pragmático en la política argentina.