El presidenciable PRO polarizará con el kirchnerismo y «discutirá» con Bullrich. Hará un anuncio por semana en la Ciudad que estará relacionado con su plataforma nacional.
El jefe de Gobierno porteño y precandidato presidencial, Horacio Rodríguez Larreta, ya tiene escrito el masterplan de su campaña electoral. Con mensaje antigrieta, el alcalde definió anuncios, estableció formas de discutir y eligió con quiénes tejer alianzas y con quiénes no. En la práctica, construirá un híbrido entre halcón y paloma, pero con dosis a cuenta gotas de “dureza”.
“Hay discusiones sanas”, explicó Larreta ante su mesa chica momentos después de su discurso en Tres de Febrero, donde estuvo con el intendente local, Diego Valenzuela, y el diputado Diego Santilli, quien compite por la gobernación de la provincia de Buenos Aires.
Los próximos anuncios estarán relacionados a temas de seguridad y desarrollo social, entre otros. «Vamos a crear, tomando a los mejores hombres y mujeres de las fuerzas, un grupo elite que sería algo así como el FBI argentino», anticipó Larreta el pasado jueves en Tres de Febrero.
En su equipo de campaña ya tienen agendadas varias visitas al interior del país. En Mendoza, participará de la Fiesta de Vendimia y en San Nicolás estará en Expoagro . También viajará a Reconquista, provincia de Santa Fe, junto al gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés. La combinación de su gira federal y las promesas de campaña que lanzará semanalmente hacen que la visita a Europa para reforzar las relaciones con la OCDE y la Unión Europea este en dudas. “Todo va a depende de lo que defina (Fernando) Straface”, sostuvieron desde el entorno del jefe de Gobierno.
En el entorno de Larreta consideran que los candidatos presidenciales que tiene la UCR todavía no tienen la misma competitividad que los del PRO y por eso no ven con preocupación de la posibilidad de realizar una interna antes de las PASO. “Mientras los radicales no logren tener a alguien que supere los 20 puntos, no hay necesidad”, afirmó uno de los defensores de esa idea.
La variable que analizan sobre la presidenta del PRO no es tanto sobre la imagen o intención de voto sino sobre el aparato político. La premisa es simple: hoy en día la exministra de Seguridad no cuenta con los medios para poder fiscalizar la elección y está abocada de lleno a conseguirlo.
Larreta posee buena parte de la estructura del PRO y mantiene un mejor vínculo con la UCR que su rival en la interna del macrismo. Quien puede darle un dolor de cabeza es el expresidente Mauricio Macri en el caso que defina competir por un segundo mandato.
Antes y después del lanzamiento de su campaña, Larreta conversó con Macri. Ambos mantienen una relación fluida, pero tirante. Lo que suceda en la discusión sobre la elección en la Ciudad terminará de definir ese vínculo.


