En una jornada cargada de simbolismo y tensión, el peronismo se mostró unido en la sede nacional del Partido Justicialista (Matheu 130), consolidando su defensa frente a la amenaza de un fallo adverso de la Corte Suprema en la causa Vialidad. La ex mandataria Cristina Fernández de Kirchner encabezó el acto, acompañada por Axel Kicillof y la plana mayor del espacio, en un mensaje claro de cohesión política y resistencia.
La cita coincidió con el Día de la Resistencia Peronista, en recuerdo a los fusilamientos de José León Suárez en 1956. CFK aprovechó la fecha para plantear un paralelismo histórico y político: “La casualidad no es una categoría política… bastó que anunciáramos una candidatura para que se desataran los demonios”, afirmó en su discurso.
Con una presencias importantes tanto del gobernador, intendentes de todos los sectores, legisladores y dirigentes sindicales— se buscó mostrar que las disputas internas han quedado en segundo plano. Fue significativo el respaldo público de Kicillof, tras meses de distancia, quien participó con una comitiva .
CFK profundizó su crítica: acusó al “partido judicial” y “a los grandes grupos hegemónicos” —en particular, al Grupo Clarín— por intentar proscribirla, a la vez que sostuvo: “estar presa es un certificado de dignidad política” . La expresidenta lanzó un llamamiento: “Basta de dividir inútilmente a los argentinos… que me metan presa si quieren, pero esto no se arregla con una detención” .
El acto derivó en un plan de acción estratégica: horas antes el PJ había convocado a una cumbre con sindicalistas, legisladores, referentes de La Cámpora y el Frente Patria Grande. Allí se acordaron protestas, posibles paros y vigilia ante la vivienda de CFK, como respuesta inmediata a lo que podría confirmarse en los próximos días . Según fuentes judiciales, la Corte podría emitir su sentencia antes del 19 de julio, fecha tope para la inscripción de candidaturas; la decisión aún permanece sin plazo fijo
La causa Vialidad sostiene una condena de seis años contra CFK por supuesta administración fraudulenta en obras públicas a favor de Lázaro Báez. Si el fallo se ratifica, implicaría prisión (probablemente domiciliaria) e inhabilitación para ejercer cargos —un golpe directo a su proyecto político
Contexto político y electoral
• La postura frontal de CFK y su estructura política apuntan a polarizar el escenario electoral, contrastando con la figura de Javier Milei. Según encuestas, la expresidenta cuenta con un respaldo del 30 %, pero al mismo tiempo un 45 % asegura que jamás la votaría .
• Por su parte, los peronistas buscan consolidar estructuras territoriales en los distritos clave, sobre todo en la Tercera Sección Electoral y la provincia de Buenos Aires, donde las elecciones son el 7 de septiembre.
El horizonte inmediato
La Corte, al igual que en otras ocasiones, no tiene un plazo estricto para fallar. Sin embargo, el calendario electoral presiona por una definición que podría llegar en semanas, con un viaje previsto de uno de sus jueces clave, Carlos Rosenkrantz, a México, lo que podría postergar la resolución.
Mientras tanto, el PJ se mantiene en «alerta y movilización», con activaciones en varios frentes: vigilia, posibles paros y una estrategia para internacionalizar el caso, incluyendo eventuales recursos ante instancias supra-nacionales.
¿Resistencia democrática?
El acto en Matheu 130 no solo fue una demostración de apoyo, sino un movimiento estratégico: el peronismo se rearma ante la posibilidad de una proscripción política de su principal referente. Bajo el lema de resistencia democrática, CFK y sus aliados juegan con la idea de utilizar, como en el judo, la movida del enemigo en su contra, que el encarcelamiento injusto actúe como catalizador de adhesión popular. Lo que resta saber es si ese respaldo traducirá votos, y cómo responderá la Corte ante esta presión política.