La actividad industrial en La Rioja sufrió una caída de entre un 20% y un 30% en comparación con 2023, según alertó la Unión de Industrias Riojanas (UNIR).
La entidad empresarial cuestionó la apertura indiscriminada de la economía y la falta de políticas para proteger a la industria nacional.
El vicepresidente de UNIR, Juan Serrano, analizó la difícil situación del sector: «Hoy en la industria vemos una suba constante de impuestos y una caída en el nivel de actividad. Esto lleva a que la gente termine comprando más productos importados en lugar de los nacionales», comentó en una entrevista con *Rioja Virtual*.
Serrano destacó que, aunque las empresas locales buscan ser eficientes dentro de sus plantas, enfrentan múltiples obstáculos externos: «Hay una industria pujante a nivel nacional, pero cuando los productos salen de nuestros galpones se enfrentan a problemas de infraestructura, costos impositivos y logísticos, y falta de apoyo del gobierno. Todo esto hace que no podamos ser competitivos.»
El dirigente señaló que la sensación predominante en el sector es de incertidumbre, lo que dificulta planificar inversiones y proyectar crecimiento. Sostuvo que hay un bajo nivel de consumo y que la actividad industrial se estabilizó en «una media baja». En este punto, marcó sus diferencias con la decisión del Gobierno nacional de «abrir tanto la economía» sin darle protección a la industria nacional.
Juan Serrano, vicepresidente de la Unión de Industrias Riojanas, advirtió que la apertura económica excesiva perjudica a la industria nacional al favorecer las importaciones en lugar de estimular las exportaciones. Señaló que, aunque la actividad industrial no cayó drásticamente, se estabilizó en un nivel bajo, con una contracción de entre el 20% y el 30% respecto a 2023.
Serrano criticó la falta de políticas de protección para las industrias locales, destacando que los sueldos no se actualizan al ritmo de la inflación, lo que afecta el consumo interno y aumenta la pobreza.
También alertó sobre el impacto de las variables geopolíticas en un contexto de apertura económica desmedida y sostuvo que la situación actual desincentiva la planificación y el crecimiento de la industria. «Hoy estamos atajando penales, no pensando en cómo hacer goles», resumió.
