La crítica de Gray no solo se limitó a la falta de oposición; también apuntó a la incapacidad del peronismo para ofrecer alternativas viables. “El gobierno tiene una agenda muy fuerte y marca el ritmo todos los días, pero enfrente debería haber una oposición seria y responsable”, agregó.
El intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, alzó la voz en un contexto de creciente tensión dentro del peronismo bonaerense, cuestionando abiertamente el rumbo que ha tomado su fuerza política. En declaraciones recientes a la AM 950, Gray afirmó que “el peronismo, que hoy tendría que ser oposición, está cooptado por La Cámpora”, señalando una preocupación por la falta de un liderazgo opositor efectivo en la provincia.
Gray expresó su anhelo por una Argentina más estable y tranquila, enfatizando la necesidad de un cambio en la perspectiva política y económica. “Llevamos 30 años lidiando con la inseguridad”, lamentó, reflejando un sentimiento compartido por muchos ciudadanos que buscan un gobierno que priorice sus necesidades básicas. En este sentido, el intendente propone construir una corriente de opinión que se aleje tanto del actual gobierno como de los extremos dentro de su propio espacio político.
La crítica de Gray no solo se limita a la falta de oposición; también apunta a la incapacidad del peronismo para ofrecer alternativas viables. “El gobierno tiene una agenda muy fuerte y marca el ritmo todos los días, pero enfrente debería haber una oposición seria y responsable”, agregó. Sin embargo, su afirmación de que “la oposición debería ser liderada por Máximo Kirchner” resuena en un contexto donde La Cámpora logró consolidar su poder en el Partido Justicialista provincial, gobernando ya 12 municipios y ocupando posiciones clave dentro del peronismo.
Este panorama revela una lucha interna donde los intendentes deben navegar entre lealtades y estrategias políticas. Mientras algunos se alinean con Kicillof buscando una renovación dentro del peronismo, otros optan por respaldar a Kirchner y su agrupación, lo que complica aún más el escenario electoral a medida que se acercan las elecciones de 2025.
La visión de Gray resuena con aquellos que anhelan un peronismo revitalizado y menos dependiente de las estructuras actuales. En un momento en que la política provincial parece atrapada entre facciones rivales, su llamado a la unidad y a la construcción de una oposición genuina podría ser clave para redefinir el futuro del peronismo en Buenos Aires. La pregunta persiste: ¿podrá el peronismo recuperar su esencia y convertirse en una verdadera alternativa para los ciudadanos?