BUZZI: A ver, compañero Jorge, necesito ser muy claro: hay mala praxis económica en el gobierno. Con la emergencia agropecuaria lo único que logran es poner títulos en los diarios pero no ponen plata en el bolsillo de los productores. Con estas políticas los más grandes se hacen más grandes y los más chicos se hacen más chicos, o desaparecen.

EA: Bueno, desde el gobierno dicen que se han tomado muchas medidas paliativas…

BUZZI: Sí, pero lo más destacado es la emergencia, y eso no alcanza. El gobierno tiene que definir con claridad a quién queremos sostener. Una cosa es el fondo de Inversión, el que se hizo en la City Porteña, o el del centro rosarino, que contratan ingenieros agrónomos, alquilan campos y se meten en un negocio netamente especulativo financiero. Y ¿Por qué tenemos que garantizarles rentabilidad a esos sectores? Ahora hay que salvar a los de carne y hueso, a los medianos y los pequeños productores, ¿O acaso lo que quieren es seguir profundizando una agricultura sin agricultores?

EA: No debería ser así, menos en un gobierno peronista.

BUZZI: Exacto, por eso yo me pregunto: ¿Cómo puede ser que un gobierno peronista todavía no estemos discutiendo 3 herramientas fundamentales para sostener a esos productores?

EA: Te referís a medidas concretas. ¿Qué habría que hacer?

BUZZI: Poner en marcha un seguro multirriesgo, un mecanismo de segmentación de retenciones como pago a cuenta de ganancias y un módulo de desarrollo ganadero. Pero lo explico y amplío: en primer lugar, es indispensable contar con un seguro multirriesgo. Porque ahora estamos muy complicados por la sequía, sin duda, pero esperá un año, cuando venga el efecto del Niño, porque va a volver, y vamos a estar discutiendo qué hacemos frente a las inundaciones. Las dos cosas hacen daño y no hay un seguro multirriesgo para 500 hectáreas, para 1000 hectáreas, para el chico, para el mediano productor. En segundo lugar, aplicar un mecanismo de segmentación de retenciones por reintegro, que me permita usar retenciones como pago a cuenta de ganancias. Porque hoy me hacen una retención del 30 y pico por ciento y encima después tengo el 35% del impuesto a las ganancias. Este esquema es insoportable para los productores medianos y pequeños. Y, en tercer lugar, poner a disposición a través del Banco Nación un módulo de desarrollo ganadero: 100 vacas por productor. Un productor, por ejemplo, tiene 100 hectáreas, bueno, ahí está la plata en el Banco Nación, te dan un crédito garantizado con vaquillonas con garantía de preñez. De esa manera, el productor tiene un horizonte de certidumbre y, además, el país se asegura un plan de repoblación ganadera sobre la base de los productores medianos y pequeños.

Con la emergencia agropecuaria lo único que logran es poner títulos en los diarios pero no le ponen plata en el bolsillo de los productores

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EA: suena muy interesante, pero seguramente no va a faltar quien diga que no hay plata para ese tipo de políticas…

BUZZI: ¡Sí que hay plata! ¡Hay que ir a buscarla! ¡Hay que frenar el robo que le están haciendo al estado y, por ende, a todos los argentinos, las multinacionales cerealeras y mineras! La plata está en el contrabando de cereales y en la elusión y evasión fiscal. Esto está pasando ininterrumpidamente desde 2017. Se inició con el macrismo en la gestión de Buryaile, siguió con Etchevehere, ¡y siguió con este gobierno peronista, con Basterra y Dominguez!. La excepción, que debo destacar, es la de Diana Guillén, la presidenta del Senasa, quien en soledad está tratando de controlar lo que se carga en los barcos.

EA: Bueno, el Senasa está muy activo y presente en todo lo referido a controles del estado sobre la calidad alimentaria, nosotros siempre lo destacamos.

BUZZI: Así es. Pero el Estado debe tener mucha más presencia. Mirá, la realidad es que hay una elusión de miles de millones de dólares. Se disfraza la mercadería y lo más absurdo es que el contralor de las cargas está a cargo de empresas privadas certificadoras cuyos propietarios son las mismas multinacionales que evaden al fisco. En 2022, como se estuvo disfrazando la mercadería que se cargaban a los barcos, consecuentemente el Estado argentino recaudó menos. ¿Qué creés que va a pasar en 2023? Se va a cargar menos porque la sequía va a impactar mucho, muchísimo. Así que se va a recaudar mucho menos también, por los dos motivos, por la sequía y por la elusión fiscal.

EA: El impacto de la sequia está siendo muy grande, y si además agregamos que no tenemos controles adecuados…

BUZZI: Mirá, en soja no creo que podamos pasar los 40 millones de toneladas, cuando lo normal era rasguñar los 60 millones de toneladas. En el trigo nos va a quedar un saldo exportable de 5 o 6 millones de toneladas de trigo porque hemos perdido la mitad de la cosecha de trigo. Entonces, evidentemente, se va a cargar menos. Pero por menos que se cargue, que al menos se controle, hermano querido. Que no se les permita a las empresas multinacionales controlarse a sí mismas, que es lo que está pasando actualmente. Lo tenemos que recalcar: ¡las empresas que certifican la carga son propiedad de las mismas empresas que están exportando! Y, lamentablemente, el gobierno nuestro, peronista, lo sigue permitiendo, con la honrosa excepción, como ya mencioné, del Senasa bajo la conducción de su presidenta Diana Guillén. Entonces, después no nos quejemos ni digamos que no hay plata. Lo mismo pasa con la minería, a la que se le permite que haga una simple “declaración jurada”.

EA: ¿Estamos al horno?

BUZZI: Hoy, sí. Porque los políticos deberían pensar menos en que este es un año electoral y pensar más en que la producción agropecuaria, base de nuestra economía, debe ser protegida y desarrollada todos los años. Necesitamos un gran acuerdo nacional pensando en el pueblo argentino. Esa tendría que ser, a mi humilde entender, la prioridad de nuestros políticos, tanto del oficialismo como de la oposición. Y, sobre todo, darnos cuenta que en la Argentina sobra plata, por más que la sequía nos haya hecho un daño gigantesco, pero hay que ir a rescatar la plata de los argentinos y argentinas que se están robando las multinacionales.

Poner en marcha un seguro multirriesgo, un mecanismo de segmentación de retenciones como pago a cuenta de ganancias y un módulo de desarrollo ganadero.

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EA: Como muchas veces dijimos, volver la mirada hacia el pueblo también implicaría volver la mirada hacia al campo, ¿No?

BUZZI: Por supuesto. Te digo más: Tenemos que sentirnos todos productores agropecuarios, todos trabajadores del campo. Todos tenemos que sentir que somos del interior, todos somos la población rural. Tenemos que dejar de seguir amontonando gente alrededor de Buenos Aires. ¿Con 15 millones de personas a 100 km de la ciudad capital no es suficiente? Hay que sostener a la población rural después de padecer 3 años de sequía. Bueno, hay que salvar al productor, hermano, hay que salvar a los peones rurales, hay que salvar a las comunidades rurales, hay que salvar a las escuelitas rurales. Hay que salvar ese ese modo de vida. Este es mi pensamiento, estimado Jorge. Larguísimo el rollo, pero bueno, creo que es explícito, querido compañero. ¡Gracias, hermano, por poder expresarme en El Agrario!

EA: Los agradecidos somos nosotros, Eduardo. Creo que dejaste muy en claro tu posición y, tengo que expresarlo, la compartimos.

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