Arrancó la repavimentación de la ruta 29, una de las más peligrosas de la provincia.

Se trata de una obra de 73 kilómetros que deberá estar terminada a fin de año.

El gobierno de Axel Kicillof arrancó los trabajos de repavimentación de la ruta 29, en un tramo de 73 kilómetros entre Brandsen y General Belgrano. Se trata de una de las arterias que conforman el mapa del peligro vial en la provincia de Buenos Aires.

La ruta 29 nace en Brandsen y termina en Balcarce. Tiene 309 kilómetros y une importantes ciudades ganaderas del interior como Ayacucho, General Belgrano y Ayacucho.

El tramo intervenido por el gobierno provincial es el inicial, desde el kilómetro cero -en Brandsen- hasta General Belgrano. Los trabajos incluyen la repavimentación de la calzada existente y la provisión de suelo para las banquinas.

Sin embargo, ese tramo no es el más complicado en cuanto a la seguridad vial. El tramo que preocupa es el que va desde General Belgrano hasta Ayacucho y que se utiliza para evitar el tránsito de camiones de la Ruta Nacional 3.

El tramo de la ruta 29 en reparación, entre Brandsen y General Belgrano.

Allí, la traza está deformada y acumula agua en los días de lluvia. En esas circunstancias es normal que haya accidentes. Cerca de Ayacucho preocupa también el estado de la Ruta 50, que va hacia Rauch, y la Ruta 74, que conecta con la Ruta 2.

La semana pasada, el gobierno provincial inauguró los trabajos de pavimentación de un camino de 47 kilómetros que forma parte de la Ruta del Cereal.

Es un tramo que hoy es de tierra y que une la Ruta Nacional 33 y la localidad de Salazar. Esto es en el límite entre los partidos de Daireaux y Trenque Lauquen, en el sudoeste bonaerense.

En el gobierno calculan que esa obra beneficiará a más de 40 mil bonaerenses que viven en una zona caracterizada por la producción de cereales, carnes y leche.

La Ruta del Cereal comprende 96 kilómetros, de los cuales solo la mitad contaba con asfalto, integrando a los partidos de Guaminí, Trenque Lauquen, Tres Lomas, Pehuajó y Daireaux. Las obras incluyen la repavimentación del camino que conecta a Garré con la ruta nacional 33; señalamiento horizontal y vertical; materialización de banquinas de tierra; alcantarillado; y construcción de terraplenes para asegurar el acceso a los campos linderos.