«EL FMI NO DEBE SOCAVAR ESA MEJORA»
«Un acuerdo que simplemente amplíe el plazo de amortización de 4,5 a diez años no es suficiente para aliviar las preocupaciones sobre la deuda de Argentina», afirma el economista.
También consideró que «un acuerdo que simplemente amplíe el plazo de amortización de 4,5 a diez años no es suficiente para aliviar las preocupaciones sobre la deuda de Argentina».
Stiglitz recordó que «el FMI reconoce ahora que su programa (stand-by) no logró los objetivos económicos que había establecido. La «Evaluación Ex-Post» del Fondo atribuye gran parte de la culpa al gobierno de Macri».
A favor del organismo, el economista opinó que en el último tiempo «el FMI ha ganado un nuevo respeto por sus respuestas efectivas a las crisis globales, desde la pandemia y el cambio climático hasta la desigualdad y la deuda».
En este sentido, agregó que «si se invirtiera el rumbo con anticuados requisitos de austeridad a la Argentina, las consecuencias para el propio Fondo serían graves, entre las que se incluye la menor disposición de otros países a comprometerse con él».
Eso, a su vez , continuó, «podría amenazar la estabilidad política y financiera mundial. Al final, todos perderían«, concluyó.
En contraposición, Stiglitz remarcó que, sin un plan vigente y austero con el FMI, «Argentina está transitando una sorprendente recuperación gracias a las actuales políticas del Gobierno que buscan fortalecer la economía real».
Ponderó que «dado el lío que heredó, el gobierno del presidente argentino Alberto Fernández a fines de 2019 parece haber logrado un milagro económico».
Por último, resaltó que «el gobierno de Fernández ha señalado que está abierto a cualquier programa que no socave la recuperación económica y aumente la pobreza».