La oposición en Perú quiere destituir a Castillo en «tres o cuatro semanas»
Como anticipó LPO, el jefe de Estado quedó a 6 votos de ser aprobare la moción de vacancia y a 11 de aprobar su destitución por «incapacidad moral». Detrás está uno de los líderes de la derecha, Rafael López Aliaga, del partido Renovación Popular.
Aliaga fue candidato en las últimas elecciones en una suerte de candidatura de ultraderecha y pretende disputar ese espacio al fujimorismo que se encuentra en caída tras tres derrotas consecutivas de Keiko Fujimori.
El argumento para sacar a Castillo es que no deja a entrar a la Fiscalía para investigar un presunto caso de corrupción en PetroPerú. «A nivel de gobierno, todos los días hay un destape, un escándalo. Qué inversión quieren para el 2022 en un país que todos los días tiene escándalos al nivel del presidente de la República y un presidente de la República que no deja entrar a la fiscalía, por favor. Él no puede obstruir a la justicia», manifestó el excandidato presidencial en un reportaje televisivo.
«Lo que veo es que la desconfianza en el Perú, en las inversiones es cada vez peor. Estamos llevando al Perú a un descalabro y lo veremos el año que viene», agregó.
Aliaga fue uno de los impulsores de la frustrada vacancia de principios de diciembre y adelantó que «La bancada quiere hacerlo muy bien sustentado para llegar (a la vacancia). Elementos hay, pero hay que ordenarlos jurídicamente. Bien hecho, no algo que sale en un día».
«En tres o cuatro semanas porque no hay apuro, realmente. Queremos tener algo bien estructurado, pero que tenga todos los elementos que no se pudieron investigar en la moción inicial, que no tuvo apoyo», puntualizó.
Pero el asambleísta fue más allá y disparó: «Yo le estoy pidiendo la renuncia del señor (Pedro Castillo), de una vez que renuncie. Ha hablado con la bancada, ellos quieren seguir un proceso más riguroso para que no pase lo del primer intento de vacancia».
Fuentes del entorno del gobierno peruano consultadas por LPO reconocen que los números de la destitución podrían estar para dentro de las semanas proyectadas por Aliaga pero contemplan un factor que hace un tiempo no era tan tenido en cuenta como la aparición de más aliados en la región que podrían salir en su respaldo.
«Alberto Fernández, Gabriel Boric, Luis Arce y López Obrador pueden jugar un rol de presión ante una intentona golpista», evaluó la fuente. Cabe recordar que, como anticipó LPO, AMLO envió funcionarios mexicanos de primera linea a colaborar con Castillo y Alberto fue el primer presidente en reconocerlo.
Sin embargo, los antecedentes muestran que en plena ola progresista en Sudamérica, los gobiernos de entonces no pudieron salvar a Fernando Lugo en una ofensiva similar en Paraguay.