La temporada de verano en Pinamar llega con grandes aumentos y pocas propuestas para quienes elijan ese destino para descansar.
Se acerca el verano y comienzan los lanzamientos de temporadas en la costa atlántica. Pinamar no es la excepción y, en este marco, lanzó su propuesta para enero y febrero, deslucida y sin grandes novedades aunque sí un 120 por ciento de aumento promedio en relación al año pasado.
El intendente de Pinamar, Martín Yeza, encabezó en el barrio porteño de Palermo la presentación de la temporada de verano, que costará el doble que en 2020 para quienes elijan ese destino como lugar de descanso.
Según trascendió, las reservas están al 90 por ciento, al igual que en otros puntos de la costa argentina, ya que el tipo de cambio desalienta el veraneo en el exterior.
Este verano, con números más amables en cuanto a índices de coronavirus, el barbijo ya no es obligatorio en lugares abiertos en la provincia de Buenos Aires y eso facilita las actividades de todo tipo.
Además, a diferencia del año pasado, los teatros, cines y boliches ya están funcionando sin restricciones de horario, ni aforo.
En ese camino de superación de la pandemia, también habrá menos ofertas en cuanto a emprendimientos gastronómicos y culturales.
La pandemia pego muy duro en el rubro gastronómico, dos emblemáticos locales cerraron sus puertas. Los dos históricos restaurantes Paxapoga especializados en comida española, fundados por Antonio Riesco y su esposa Tina, quienes desembarcaron en esas tierras en 1977. El único que queda en pie en la costa es el de Paxapoga Cariló.
Una visita de nuestro corresponsal constato el deterioro y abandono que se ve en las calles céntricas de Pinamar. Basura en las esquinas, ramas, veradas rotas y hasta aguas servidas em pleno centro, como el caso de líquidos cloacales en la vía publica, por ejemplo en Bunge y de Las Artes, frente el famoso restaurant «Tante».
En la misma Carilo nos encontramos con pastos altos, suciedad y una sensación de abandono general.
Y para completar un cuadro desolador los índices de inseguridad en todas las localidades de Pinamar han aumentado sensiblemente.
En nuestra recorrida pudimos observar presencia policial, por ejemplo un grupo de escuadrón de la montada recorriendo la calle Bunge, los vecino denuncian que no ha habido hasta ahora dando demasiadas respuestas desde el municipio que conduce Martin Yeza. El fenómeno de la inseguridad se prevé que alcanzara su pico mas alto en la próxima temporada 21/22.
AM
